A Hilda, un amor...

[Fulgencio Cerón Cervantes]

Subí al nirvana del amor
entre sollozos y risas
Vaciando mi ternura te besé
susurrando entre tus pechos
Supe de tu vida aún sin preguntar
y tapando mis oídos te ame
Soñé que tu presencia era real
y un frenesí recorrió mi piel
Pido que tu sonrisa se estire
ante todos los días que han sido
los que han de ser
y los que aún siendo son
Hilda eres un placer
una historia con corazón
un sueño hecho verbo
un amor al que escribir
un imposible adiós...

[Fulgencio Cerón Cervantes]

Hilda es una amiga a la que conocí en la red, en distintos blogs en los que escribo. Me fascina, a medida que voy conociendola, su vida es de las que llenan libros, dejan huella, y aún así me la imagino sencilla, accesible y muy humana. En fín, un alma gemela en muchos planos...