Querida soledad no desesperes
Parece que los días siguen a las noches
Y aunque me haya olvidado de ellas
Sigo siendo un trovador noctámbulo
Mis sueños siguen buscando nuevos cielos
Los pasos se hacen lentos sin la dirección adecuada
Aun así veo luces lejanas que me recuerdan
Todo por lo que merece la pena sentirse vivo
Esos blues que escucho cuando quiero componer
Me transmiten la fuerza para desenfundar
Mi vieja armónica Hohner
Me conducen a instantes intemporales
Donde el dolor deja paso a la esperanza
Esa que me despierta cada mañana
Querida soledad a veces te busco
Necesito abrazar a través tuyo a mi ser
Cuando la cotidianidad me abruma recurro
A mis momentos vacíos de pensamientos
A mis estudios sobre como hacer sencillo
Todo lo que nos empeñamos en complicar
Al fin y al cabo todo consiste en seguir
Paso a paso firme como un árbol
Como un ser humano del pleistoceno
Haciendo de la historia
Mi historia…
Fulgencio Cerón Cervantes 22-04-2016
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