ese blanco inmaculado
merece ser ennegrecido con estas letras
sin pretender emborronar el espacio abierto
solo siendo el autómata
con dedos puestos en el discurrir del teclado
en una suerte de disparate verbal
en el entrometido mundo disperso
el habla de los signos
que se escapa de las sombras
para pasear sin rumbo en el devenir propio
ocaso de algún dios perdido en memorias sin historia
loco entre tejados
saltimbanqui de desvanes y recuerdos
despertar entre cuevas y claros y sombras y luces...
amante de los lugares
que conservan su aureola de presente
con el descaro del idiota que apuesta su cara
viviendo el día a día
ajeno a los alegres papeles que fueron algún día
a las remoras que me enseñan mis arrugas y canas
entreacto del cotidiano discurrir donde refugiarse
solitario en peldaños que ni suben ni bajan...
fiel autómata seductor de ahoras
inconsciente por decisión propia
antediluviano sentimiento con el que salto a mi propio vacio
encuentro en la frontera que se abre al silencio
casi la nada que llena los huecos sin lagrimas
dueño de sueños de los coros que discurren solos
¡tan cerca llenas el espacio abierto a la sonrisa...
como sencillo haces al viento que me penetra!
zen de los amaneceres...
espacio...
¡Necesitas ser un miembro de gencyceron para añadir comentarios!
Participar en gencyceron