La fe se levantó bailarina esta mañana
llenó todo mi espacio de presagios bien abiertos
me susurro un blues muy despacito
mientras abrazaba los rayos de sol en la ventana
como ecos hechos de presente vistieron
de color el final del sueño entre sabanas
dejaron desiertas las cortinas bien verdes
los acantilados donde mi yo volaba
las ultimas telarañas en brazos de morfeo
sonidos sordos que acarician esta aurora
puertas que me acercan a cielos sin nubes
noches a la luz de acordes borrachos
noticias del desierto abrasador y sin montañas
falsas copias que arrancan de principios auténticos
notas que de un piano resuenan en mi oído
con esa cadencia que ilumina el nuevo día
puede que tu nombre sea Emilia, Alba o Cometa
pero el amor no tiene denominación de origen
se deja llevar por albores nuevos
sin la dirección de un dedo que nos dirija al paraíso
sin julietas ni romeos ni tumbas ni persecuciones
con todos los ecos de los que han sido...
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