el silencio terminó por interesarme
no había rostros ni imagenes
solo y sin espejos
canté y silvé en voz alta
un eco sin destino afloró sin más
y la estancia se llenó de luz
era domingo y era de día
y estaba yo pleno de vida
dispuse mi ropa a la vista
una musica de jazz suave
y decidí que saldría
recorrería calles avenidas y
tal vez descansaría en un banco
leería la prensa o quizas no
puede que volviera a oir la musica
o mejor decido seguir en cama
imaginando escenarios
y con miles davis de fondo
entre sabanas y sueños...
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